Hay un montón de recetas de gofres dulces que mucha gente conoce. Pero si hablamos de gofres salados, entonces ya no encontramos tal abundancia de recetas. Hoy os traigo una. Esta receta de gofres de patatas y espinacas surgió porque yo siempre desayuno salado. Un día que me sobró un poco de pure de patata después de comer, me puse a pensar que podía hacer con ello. Resulta que me acababa de comprar una gofrera y pensé que sería buena idea intentar hacer unos gofres salados.
Podéis usar estos gofres para desayunos o para hacer pinchos. Son perfectos para todas las personas que evitan el gluten. A mi me encanta tomarlos con salmón ahumado o, el día después de cocinarlos, cuando ya no esta tan suaves, ponerlos en el horno con un poco de queso rallado y tomate.
En realidad podéis prepararlos de muchas maneras diferentes.
¿Cocinamos?
Vamos a necesitar:
- 500 g de patata cocida
- 130 g de queso feta
- 100 g de queso tierno de cabra, o cualquier otro
- 150 g de espinacas congeladas
- 30 ml de aceite de oliva extra virgen
- 4 huevos caseros
- 50 gr de harina de arroz
- 1 cucharadita de baking powder
- Especias al gusto. Yo suelo poner: ajo y cebolla en polvo (1 cucharadita de cada) y hierbas de provenza (1 cucharadita)
Preparación:
Antes de todo tenéis que cocinar las patatas. Luego las metemos en un recipiente y las aplastamos con un tenedor o con un aplastador para purés hasta obtener un puré uniforme.
En el paso siguiente, rallamos el queso tierno con un rallador de malla gruesa y lo añadimos, junto con queso feta, al pure de patatas. Lo mezclamos todo junto muy bien. Ahora vamos a incorporar las espinacas descongeladas y el aceite de oliva y otra vez lo mezclamos todo junto. Yo utilizo espinacas congeladas en hojas.
A continuación, en otro recipiente, batimos los huevos, hasta que estén bien mezclados y aparezca espuma.
En otro recipiente pequeño mezclamos la harina de arroz (podéis utilizar también harina de trigo, o de maíz, o de trigo sarraceno) con especias y baking powder.
Incorporamos la harina con especias a la masa de patata, lo mezclamos, y finalmente incorporamos los huevos batidos y otra vez lo mezclamos todo junto bien.
Así vamos a obtener una masa bastante sólida.
Mientras tanto calentamos la gofrera y, cuando ya esté bien caliente, ponemos en ella la masa de nuestros gofres. Os recomiendo no meter mucha masa porque se saldría por todos los lados. Hay que poner lo justo para que queden cubiertos los moldes.
Por último horneamos en la gofrera hasta que estén doraditos.
¡Buen provecho!